Nancy es originaria de la comuna de Camiña, conoce desde muy niña el tejido de lana de Alpaca, dado que su mamá a los 12 años comenzó a enseñarle las técnicas tradicionales de tejido Aymara. Ella realiza sus tejidos en conjunto con sus hijos y su madre; dentro de los que destacan Ponchos, ruanas y bufandas, es así que hilan la lana y las tiñen con hierbas que recolectan del altiplano chileno, como siputola, umatola, queñua, entre otras.

Actualmente vive en Colchane específicamente en la localidad de Pisiga Carpa junto a su esposo e hijos y se preocupa de los tejidos del Carnaval de Isluga.

Marcelina nació en la comuna de Colchane, sin embargo, se trasladó desde muy pequeña a Pozo Almonte, porque su familia quería buscar nuevas oportunidades de sustento económico. A los 7 años su madre comenzó a traspasarle sus conocimientos en tejidos textiles de lana de alpaca, que a su vez su abuela le había enseñado. A la fecha lleva más de 30 años en este oficio.

Ella teje con su grupo familiar que la componen sus hijas y cuñadas y está muy orgullosa y agradecida de su oficio, ya que gracias a los textiles que confecciona le permitió educar a sus hijos que hoy son profesionales, esto sin tener que dejarlos y salir a trabajar fuera de su hogar.

María es de la comuna de Colchane, específicamente de una zona llamada Iscapiña, a los 12 años llego a la comuna de Pozo Almonte, ya que su familia se trasladó por temas laborales. Durante su niñez, su madre le enseñaba la técnica del tejido de lana de alpaca, ya que como toda Aymara debía saber tejer ya que es parte de su cultura.

Actualmente lleva más de 30 años tejiendo y se siente orgullosa de ser una artesana de la Cooperativa Aymar Sawuri, lo que le permite trabajar desde su casa y no desatender su familia. Hoy se destaca con los tejidos en telares de 2 y 4 pedales y los productos tejidos con puntos de K´ille y ojitos de Perdiz.

Elizabeth pertenece a la comuna de Pozo Almonte, pero sus padres son oriundos de la comuna de Colchane, ella aprendió el arte del telar a los 8 años a través de su madre, quien le enseñó y traspasó esta tradición Aymara. Desde los 18 años se dedica a comercializar los productos que confecciona y actualmente realiza los tejidos en compañía de su grupo familiar. La materia prima para sus tejidos, la obtiene de las alpacas que posee el grupo familiar y también compra a otras artesanas.

Las lanas las tiñe naturalmente con hierbas del altiplano y las que más utiliza son la siputola y la umatola. En cuanto a las técnicas que más utiliza para fabricar sus productos destacan el telar de 2 y 4 pedales. Hoy en día forma parte de la cooperativa Aymar Sawuri y está orgullosa de ser Aymara y de que la gente valore esa cultura.

Dominga es oriunda de la localidad de Iscapiña, comuna de Colchane, ella al igual que muchas de las artesanas aymaras aprendió este oficio desde los 7 años a través de su madre, quien le enseñó el arte del telar para que ella se confeccionara su propia vestimenta de uso diario, desde ese momento no ha dejado de tejer y ha transformado esto en su sustento de toda la vida. Dominga utiliza las técnicas tradicionales de telar de 4 estacas y telar de cintura, así como también telar de 2 y 4 pedales, sus lanas las obtiene de sus propias alpacas y también comprando a otras artesanas, tiñe con hierbas del altiplano.

Dominga ha sido reconocida con el “Sello de excelencia de Artesanía”, que otorga el Ministerio de cultura y las artes.

Eugenia es oriunda de la localidad de Pisiga Carpa en la comuna de Colchane. A los 8 años su madre le enseñó el arte del telar para que ella se confeccionara su propia vestimenta de uso diario, en la actualidad teje junto a su grupo familiar, ya que la artesanía textil en lana de alpaca se ha trasformado en su fuente de trabajo y en su profesión. Para adquirir su materia prima, compra lana en vellón y ella misma la hila, luego tiñe con hierbas del altiplano como la siputola, umatola, chachacoma, lampaya, queñua y eucaliptus.

Las técnicas que utiliza son con telares de 2 y 4 pedales, y también sabe las técnicas tradicionales de telar de 4 estacas y de cintura, con estos teje cintillos y talegas, que son textiles tradicionales Aymara.

Sandra, es oriunda del pueblo de Pisiga Centro de la comuna de Colchane, sin embargo creció en la comuna de Camiña. A la edad de 16 años se trasladó a vivir en un internado en la comuna de Alto Hospicio para cursar la enseñanza media. A la edad de 10 años, su madre comenzó a traspasar los conocimientos de la artesanía textil con la finalidad de no perder la tradición y la cultura Aymara. Con ella aprendió la técnica tradicional de telar de 4 estacas, a la edad de 25 años, aprendió la técnica de telar de 2 pedales.

Hoy en día teje sola y su esposo la ayuda haciendo los flecos de sus tejidos. Actualmente forma parte de la cooperativa Aymar Sawuri, y sus objetivos son poder comercializar sus productos para ayudar al ingreso familiar.

Aurora es oriunda de Bolivia del pueblo de Turco, sin embargo a los 27 se vino a Chile con su esposo, a la localidad de Pozo Almonte donde vive actualmente. Ella teje en lana de alpaca desde niña, ya que es una tradición transmitida desde su abuela. Comenzó Hilando y tejiendo a palillo.

Actualmente pertenece a la cooperativa Aymar Sawuri, por lo que pone a disposición sus técnicas a utilizar en los tejidos es el telar de 2 y 4 pedales, faja y palillo para tejer Ruanas, Ponchos, Cubrecamas, Chales y Bufandas. Aurora ha convertido la artesanía textil de lana de alpaca en su sustento de vida.

Maritza vive en la localidad de Enquelga en la comuna de Colchane, ella teje desde los 8 años de edad a través de las enseñanzas de su madre y además ha tomado cursos con la municipalidad de Colchane en donde aprendió a tejer en telar. Su principal motivación para seguir tejiendo, es continuar con esta tradición y dejar el legado a sus hijos para mantener la cultura.

A través de su trabajo en artesanía textil de lana de alpaca, ha participado en varias ferias y exposiciones. Además, ha estado en diversas agrupaciones de artesanía textil en las cuales se ha agrupado con otras artesanas para continuar desarrollando esta actividad. Actualmente pertenece a la Cooperativa Aymar Sawuri.

Las técnicas que utiliza en sus tejidos son Telar de 2 y 4 Pedales, 4 estacas y telar de cintura. Las lanas son teñidas con hierbas del altiplano.

Nely Castro es de la localidad de Enquelga ubicada en la comuna de Colchane, aprendió el tejido tradicional en lana de alpaca desde los 5 años a través de la transmisión de su madre la cual ha sido traspasada de generación en generación. Actualmente lleva más de 30 años dedicándose a la artesanía textil en lana de alpaca.

Su principal motivación para continuar con esta actividad, es mantener la cultura que le enseñó su familia transmitiéndose a las futuras generaciones. Actualmente pertenece a la Cooperativa Aymar Sawuri. Esta artesana se especializa en tejido tradicional en telar de 4 estacas y telar de cintura, también utiliza telar de 2 y 4 pedales.

Juana es de localidad de Pisiga Carpa en el límite de Colchane, sin embargo, emigró a la localidad de Pozo Almonte en la Región de Tarapacá.
Desde su niñez, su madre le enseñó a hilar y tejer tejidos tradicionales ya que era parte de su vestimenta y uso para el hogar. La artesanía textil, es parte de su cultura la cual se va transmitiendo de generación en generación. A los 23 años se inició en telares de 2 pedales, Las técnicas utilizadas para sus tejidos son telar de 4 estacas en suelo, telar a 2 pedales, las lanas para sus tejidos las obtiene de sus animales y a veces compra en Bolivia y artesanas de la cooperativa Aymar Sawuri.

Ha teñido con diferentes hierbas del altiplano, por ahora utiliza las hierbas siputola, umatola, lampaya y la cáscara de cebolla.

Yenny es de la localidad de Pisiga Carpa en el Límite de Colchane, actualmente vive en la comuna de Alto Hospicio. Ella a través de su madre aprendió desde los 10 años a hilar y realizar tejidos tradicionales ya que es parte de la cultura saber tejer sus propios aksu (traje de la mujer Aymara, consiste en un paño de color café o negro, tejido a telar con el que envuelven su cuerpo. Va prendido a los hombros con topus o alfileres de plata y ceñido con una faja o wak’a. Una manta llamada llijlla, cubre los hombros y la espalda.), faja, frazada entre otras piezas.

Actualmente desarrolla los tejidos junto a sus hijos, hermanos y madre. Su principal motivación para continuar con la artesanía textil en lana de alpaca es su madre Juana Choque, quien es la gestora del arte textil y además es una forma de seguir con la tradición familiar para preservar visibilizando la cultura a través del tejido. Actualmente es la presidenta de la cooperativa Aymar Sawuri
Con la artesanía textil de lana de alpaca ayuda económicamente a su familia, y visualizó que muchas artesanas estaban en la misma situación, por lo cual decidió agruparlas para vender sus productos.

Yenny maneja todas las técnicas textiles y se especializa en tejer Chales, túnica y pieceras, tejido a telar de 2 y cuatro pedales.